Morrillero alicantino
El Morrillero alicantino es un buchón que, como muchos otros palomos españoles, nació del cruce de un valenciano con un quebrado murciano. El resultado de esta paloma fue un ave muy resistente y con un gran vuelo, el cual muchos alicantinos se acostumbraron a ver en las plazas y edificios. Son bellos a simple vistas, parecidos al quebrado murciano, pero con otras características heredadas de los valencianos.
Esta paloma se ha desarrollado con la finalidad de conseguir las mejores características. De hecho, los descendientes conseguidos del valenciano y el murciano se cruzaron con palomas frecuentes, no muy populares, de la provincia alicantina.
A continuación, desglosaremos a detalle cada una de las características de este interesante buchón que vuela las calles de alicante y convive junto a los humanos sin llegar a molestarse. ¡Acompáñanos!
Origen del Morrillero alicantino
Esta ave data su origen a principios del siglo XX, sin que muchos criadores y aficionados supieran realmente quién era y cómo había surgido. El nombre que se le fue dado, como ya se podría suponer, proviene de la provincia de Alicante, donde son comunes hasta el día de hoy. También, gracias a la forma de su cuello, que siempre se mantiene arqueada, y la figura que adopta cuando está en celo, le otorgaron el nombre de “Morillo”.
Apariencia general del Morrillero alicantino
Este es un palomo de longitud media, con una contextura fina que destaca del resto. Tiene una estética muy peculiar, belleza que ha cautivado los corazones de los aficionados y todos aquellos amantes de las aves. En general, difiere de los demás palomos conocidos, gracias a su finura y esbeltez de cuello, engrifado en su parte trasera, características que, como se mencionó anteriormente, le denominó como Morillo. También, cuenta con la peculiaridad de que, cuando alza el vuelo y recorre grandes distancias, sus alas se mueven como si fuesen unos remos.
Características del Morrillero alicantino
La longitud del Morrillero alicantino es de aproximadamente 22 y 27 cm, medidos desde la cabeza hasta la cola. En cuanto a la longitud del cuello, este debe ser por lo menos de la mitad de la medición del cuerpo anteriormente reseñada.
El cuello, en sí, es una de las características más importante del ave, formando parte del estándar de la raza. Debe ser largo, y sobre todo arqueado en su parte de atrás, grifándose en forma de morrillo. Las alas es otra de las cualidades que lo hacen diferenciar del resto. No deben sobrepasar nunca la longitud de la cola, y al estar el animal parado, tiene que dejarlas caer por debajo de la cola, una característica que han nombrado como “cacho”. Por otro lado, la cola, suele ser ahuecada y abierta hacia abajo, simulando la forma de una teja de casa. Al volar se debe grifar.
La cabeza del Morrillero alicantino es fina y larga, con una forma redonda en su parte trasera y que se estrecha hasta unirse a la nariz. Las plumas pueden venir en todas las variedades y coloridos, incluyendo azules, azules moteados, blanco y negro.
Vuelo
Estos palomos tienen un estilo de vuelo muy peculiar. Se observa que las alas las mueven en forma de remos, es decir, hacia atrás y, cuando persigue alguna pieza, llega incluso a tocarla unos instantes, para después menarla hacia su pulmonar.
Defectos
Se considerarán defectos de la raza que sean cortos de cuellos, tenga cola plana y arqueada hacia arriba, vuele sin acentuar su morrilo y pulmón, entre muchas otras exageraciones del cuerpo.
Cuidados básicos
En cuanto su alimentación, es un ave que debe seguir una dieta en la que se incluyan diferentes tipos de granos, pero que se otorguen de manera moderada ya que pueden caer en obesidad. También, es recomendable dar algún tipo de verdura como lechuga o zanahoria.
No se recomienda tenerlo mucho tiempo enjaulado y su plumaje debe mantenerse constantemente para sacar el máximo provecho de su belleza.